viernes, 28 de septiembre de 2007

Cuando no estamos juntos
me deprimo...
Miro tu foto,
recuerdo tu rostro...
El tiempo cruel
pasa muy lento sin vos...
Aquí te espero, amor mío,
sediento de tus labios...
hambriento de tu amor...

Katherine Huamani 1ª 1ª

viernes, 7 de septiembre de 2007


Apestada por el dolor
crece mi soledad
se marchitan mis sentimientos
y resucita mi maldad.

Tropiezo con mis sombras
porque mi sol se desvanece.
La culpa me carcome el aliento
Mi caridad desaparece

Anónimo
2do 4ta

Reseña de “El diario e Adán y Eva”


El texto de Mark Twain relata con mucho humor e inocencia las andanzas y aventuras del primer hombre y la primer mujer, tomando como base los sentimientos y emociones que afloran en ellos al descubrir lo que los rodea.
El autor norteamericano, que nació en 1835 y escribió “El diario de Adán y Eva” entre 1890 y 1900, se caracteriza por haber creado obras totalmente polémicas y realistas. El “Diario” fue escrito en un momento en el cual falleció su esposa y dos de sus hijas, habiendo también fracasado en sus negocios.
Adán y Eva se resaltan por ser totalmente distintos y por amarse cada uno a su manera, donde el mejor regalo es el amor e ingenuidad con el que hablan.
Es un libro muy recomendable para todas las edades ya que su interesante versatilidad atrapa al lector hasta la última de sus hojas.

Rocío Alterleib
3º 4ª

El amor es como una voz roja
Que penetra suavemente mí corazón.
Sin el amor siento,
a la muerte que irrumpe en mí
Tan dura, tan poderosa
Como un viento triste
Que arrasa todo vestigio de viday está tierra, se vuelve seca y llena de dolor.

Mariano Islas
2do 4ta

Eva habla (escribe) sobre sus hijos.

Lunes:
Cuando se acabaron los días de dolor y lágrimas, bajé veinte kilos en menos de dos horas. Fue increíblemente precioso ver eso saliendo de mí. Al sostenerlo en mis brazos me di cuenta que el corazón me latía de una manera indescriptible y ahí fue cuando supe que amaba a esa criatura nueva y que debía nombrarla como había hecho antes con las demás cosas del jardín.
Decidí llamar “LA” o “LO” “Caín”, ya que me sonaba a dulzura y sabiduría.

Meses después:
He descubierto con desconcierto que el nuevo experimento tiene los ojos grandes y marrones como Adán y el pelo castaño como el mío. Desde el momento en que lo vi supe que tenía algo que ver con “nos” por que al mirarlo note parte de mí en él y no puedo dejar de imaginarlo creciendo y aprendiendo, poco a poco, la vida en el jardín.

Un año más tarde:
Hoy nació “Abel”. Sentí que parte de mi corazón estaba dentro de él o que su alma tenía algo de la mía. También noté desde un principio cuanto lo apreciaba y cuán distinto era de Caín; demasiado celoso y sus ojos irradiaban belleza por donde quiera que mirara.

Yo amaba a las nuevas criaturas y aún más cuando me di cuenta de que eran mías. Muchas veces quise demostrarles el afecto que les tenía, pero conocía muy pocas palabras y ninguna podía describir exactamente lo que sentía. Hasta que un día en el que vi a Caín ahogándose, lo salvé y al sacarlo del agua le prometí que jamás iba a dejarlo de nuevo. En ese momento, en esos pequeños segundos de horror y de temor a perderlo, me di cuenta de que sin ellos no soy nada y que ellos son yo. En síntesis, creo que en esta vida los “HOJIS” se tornan más importantes que uno mismo.

Rocío Alterleib
3º 4ª
Puedes decir que estoy loca
Por que te sueño despierta
Observo tus ojos entre la multitud
E imagino nuestras miradas uniéndose:
Solitarias, únicas, inigualables;
Como si las estrellas perdieran su brillo
Solo para vernos juntos.
Esto es lo que demuestra tu teoría:
Veo el mundo con los ojos cerrados,
Vuelo con solo pensar en vos
Y nunca dejo que mis pies vuelvan a tierra.
Por que sé que si desaparecieras
Los planetas dejarían de girar para irse con vos.

Rocío Alterleib
3º 4ª